¿Las almas gemelas existen?

18 marzo 2022

¿Hay alguien perfecto para cada ser humano? ¿Necesitamos encontrarlo para completarnos? ¿De dónde surge el concepto de las “almas gemelas”? Si alguna vez te has hecho estas preguntas, en el siguiente artículo podrás encontrar la respuesta. 

En este fragmento, Enric Corbera nos explicará el Mito del Amor Romántico para descubrir los mitos de las relaciones de pareja y cómo mejorarlas. El enamoramiento podríamos definirlo como uno de los sentimientos más intensos, incontrolables y especiales que puede sentir un ser humano.

En este vídeo, Enric Corbera nos hablará de “El Amor Sabio”. Frecuentemente nos preguntamos si sabemos realmente qué es el amor, por eso, Enric Corbera se adentrará en lo que es el auténtico amor y nos daremos cuenta de que lo que entendemos por amor, no siempre se corresponde con lo que realmente es. 

¿Qué son las almas gemelas?

Las almas gemelas y el amor

Según el relato mítico que cuenta Aristófanes de los orígenes del amor en la obra de Platón «Simposio», los primeros humanos estaban completamente unidos tanto en cuerpo como en alma. Los dioses se sintieron intimidados por su poder y es entonces cuando Zeus decidió cortar en dos mitades a cada uno.

A través de este mito Aristófanes justifica su explicación acerca del origen del deseo de amarnos los unos a los otros.
Afirma que: «El amor nace en cada ser humano; llama a las mitades de nuestra naturaleza original juntas; intenta hacer una de dos y sanar la herida de la naturaleza humana. Cada uno de nosotros, entonces, es una «mitad equivalente» de un todo humano … y cada uno de nosotros siempre busca la mitad que lo iguala». 

Diciendo así que el amor es, en sí, el descubrimiento de la propia alma gemela o, cómo se dice actualmente: encontrar a tu otra mitad, lo que crea la necesidad y la dependencia del ser amado para sentirnos completos.

almas Gemelas Zeus

¿Necesitamos a nuestra alma gemela para sentirnos completos?

El filósofo se refería a la herida simbólica que produce el deseo de completitud y, aún hoy en día, es común pensar en el amor como la solución a muchos de nuestros problemas personales. Es decir, tal y como se concibe el amor romántico, se sigue interpretando la unión amorosa como un medio para completar nuestras carencias vitales.

Este discurso tan común que, como hemos visto, tiene sus orígenes hace miles de años, es una de las primeras causas de la concepción de la pareja como algo posesivo, dependiente y manipulativo

En definitiva, un tipo de amor que acaba llevándonos a la frustración, pues nuestras expectativas y creencias se basan en metas inalcanzables, constituyendo una visión idealizada que no podemos trasladar ni imponer a nuestra pareja.

El amor verdadero no siempre lo encuentro en mi alma gemela

A todos nos ha pasado, o hemos vivido de cerca cómo una pareja que creíamos perfecta, al conocerse más a fondo, no acaba de “encajar”. Tras la pasión y el desorden del enamoramiento inicial comienza la verdadera prueba. El auténtico amor consiste en reconocerse mutuamente y descubrirse a uno mismo a través de las diferencias, a través de todo aquello que, aunque pueda percibirse como diferente, forma parte de la misma esencia: la humanidad, la herida y el valor que todos y cada uno tenemos.

¿Existen las almas gemelas?

Como Platón le dijo en su día a Aristófanes: “el amor verdadero es mucho más mundano” o, dicho de otro modo, como describe Becker en sus cartas de amor: “Cuando un poeta te pinta en magníficos versos su amor, duda. Cuando te lo dé a conocer en prosa, y mala, cree.” 

Ambos autores se refieren a que el amor, el verdadero amor,  es más sencillo y natural que la búsqueda de aquel ser perfecto e ideal supuestamente destinado para nosotros. No existen las almas gemelas y, al mismo tiempo y aun así, cada pareja, cada alma, es reflejo de la nuestra y una oportunidad de reconocernos en los ojos del otro.

Almas Gemelas Manos

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuando cambias tu mentalidad para pasar de buscar a alguien que te complete a alguien que te complemente, estás dando el primer paso hacia un amor real, que no se sustenta en proyecciones ni idealizaciones. 

No se trata de esperar encontrar a alguien perfecto, hecho a medida para nosotros, sino otro ser auténtico y libre, que quiera compartir su esencia y su libertad con nosotros; y todo esto parte, evidentemente, de la autenticidad y la libertad que estemos dispuestos a ofrecer y compartir.

“El verdadero amor no se conoce por lo que exige, sino por lo que ofrece.”

Jacinto Benavente

Si te ha gustado, compártelo

Curso de Introducción a la Bioneuroemoción

Comentario

Escribe tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

© 2021 Enric Corbera Institute.

© Enric Corbera Institute.