No logro abundancia: cómo despejar las limitaciones autoimpuestas

¿De qué crees que depende que tengas abundancia en tu vida? ¿A qué o a quién atribuyes tu estancamiento laboral o éxito financiero?

Muchas veces, las personas piensan que no logran vivir la vida que desean debido a su entorno, a su situación social, raza, género o edad, entre otros factores. 

Sin embargo, pocas veces se detienen a pensar que tal vez son sus propias ideas sobre quiénes son y qué pueden lograr las que realmente los están frenando. En este artículo hablaremos sobre esas limitaciones autoimpuestas y qué podemos hacer para trascenderlas y mejorar nuestra vida.

Creencias que potencian o nos alejan de nuestra abundancia

Lo que pensamos acerca de nosotros mismos se fundamenta en ideas arraigadas que compartimos con la familia o la sociedad. 

Algunas creencias limitantes muy comunes son: “Las familias humildes no tendrán dinero nunca”, “No es posible ganarme la vida haciendo lo que me gusta”, “No soy suficientemente buena/o”, “Necesito dinero para ser feliz”, etc.

Estas creencias pueden condicionarnos a vivir abundancia o escasez, dos caras de una misma moneda. Ambas corresponden a la conciencia con que vivimos lo que nos sucede. 

Quien nos permitimos ser y el lugar que ocupamos en el mundo (en las relaciones, en el ámbito laboral, etc.) son el reflejo del lugar y rol que tenemos en nuestra familia de origen. El problema surge cuando, para no ser excluidos, consideramos que no podemos comportarnos ni pensar diferente. 

Hacerlo implicaría generar un estrés, crear desorden a nuestro alrededor. Y no todos estamos dispuestos a enfrentar esas consecuencias.

«El hundimiento de una creencia crea una nueva dimensión del sujeto, al obligarle a conducir su personalidad a lo largo de un eje situado fuera del plano de aquella.»

Juan Benet

Ir más allá de lo que nos limita

Siempre hubo personas que transgredieron las normas de su familia o de la sociedad.

Cada vez hay más mujeres astronautas, un ejemplo es la española Sara Garcia que el año 2022 fue promovida a astronauta por la agencia espacial europea.

¿Qué hubiese sucedido si estas personas no se hubieran atrevido a ir más allá de las creencias de su familia o de la cultura en que vivieron, si hubieran renunciado a seguir sus sueños? 

Quizás la creencia más importante y aplicable a todos los tiempos es “creer en uno mismo”.

Qué nos impide crecer laboral o económicamente

De niños aprendimos lo que creemos que merecemos, de lo que somos capaces o hasta dónde podemos llegar. En la vida adulta muchas veces vivimos con limitaciones autoimpuestas por estas creencias relacionadas con nuestra raza, género, poder adquisitivo, etc., como si fueran la única opción. 

Son estas creencias las que se ven reflejadas -habitualmente de manera inconsciente- en nuestro desarrollo o estancamiento laboral y económico. Tomar conciencia de ello es lo que nos permitirá trascender lo que consideramos escasez.

Al reconocer que es nuestra forma de percibir lo que condiciona nuestro sentir y, por tanto, nuestro accionar, podemos utilizar estas experiencias como una guía para descubrir lo que nos condiciona internamente. Esto nos permite transformarlo y transformarnos. 

Si cambiamos nuestra percepción acerca de quiénes somos, se transformará nuestra identidad y, por tanto, inevitablemente experimentamos otra realidad, incluso sin que cambien significativamente las circunstancias.

Adaptarse a un nuevo mundo con abundancia

Cambiar de posición o aumentar nuestros ingresos suele implicar un cambio profundo en nuestra identidad personal. 

Sin embargo hay una línea que divide la esencia de lo que somos y lo que hacemos, y es precisamente ese lugar donde pueden surgir contradicciones, porque todo cambio implica dejar ir viejas costumbres e identidades. 

Pero ¿qué sucede cuando creemos que somos nuestra personalidad o nuestros hábitos? Así como una oruga necesita abandonar su antigua forma de mostrarse al mundo para transformarse en una majestuosa mariposa, necesitamos transformar nuestra percepción acerca de nosotros mismos para que nuestra experiencia sea diferente.

Desaprender lo que fuimos

La verdadera dificultad no es aprender nuevas habilidades en momentos de transición, sino desaprender los comportamientos que se han arraigado en nuestra identidad. Allí podemos sentir miedo a dejar de ser quienes somos o, incluso, creer que vamos en contra de lo que nos ayudó a sobrevivir hasta hoy.

Por ejemplo, una persona que desde la infancia aprendió a ser amable y complaciente con los demás para sentirse aceptada corre el riesgo de no permitirse mostrar su desacuerdo y limitar su progreso. Otra opción es que reprima su enojo cuando necesita establecer límites claros,  manejar conflictos con firmeza o promover cambios. 

Atrevernos y dejarnos guiar hacia la abundancia

Integrar la energía masculina y femenina es necesario para poder trascender las creencias que limitan nuestra abundancia. 

Para transitar nuevos caminos y experiencias necesitamos aventurarnos hacia lo desconocido y atrevernos a vivir en la incertidumbre. Esas son características de una energía masculina equilibrada. 

A su vez, para ser fieles a quien realmente somos y hacer realidad nuestros anhelos, es preciso dejarnos guiar por nuestra intuición. También será necesario aprender a mantenernos receptivos a las oportunidades (aunque vengan en forma de crisis). Estas son un ejemplo de una energía femenina equilibrada.

Para dar estructura y constancia a nuestros planes, saber motivarnos en el camino y aprender a ser resilientes, necesitamos danzar entre ambas energías que conforman nuestra identidad. 

De esta manera, la armonía y coherencia con que vivamos se verá reflejada en nuestra conciencia y podremos experimentar su estado natural, la abundancia.

Nuevos horizontes: Redefinir nuestros límites

En conclusión, nuestra visión de abundancia y del éxito se define en gran parte por cómo nos vemos a nosotros mismos, por nuestra disposición a desafiar nuestras verdades más arraigadas y por las limitaciones que decidimos superar. Prosperar, por tanto, tiene que ver más con nuestra actitud y menos con nuestras circunstancias.

Al desafiar nuestras creencias establecidas y adoptar nuevas perspectivas, transformamos no solo nuestra situación laboral y financiera, sino también nuestra experiencia vital en su totalidad. 

Cada paso que damos hacia la reevaluación y expansión de nuestros propios límites es un paso hacia nuevos horizontes, acercándonos cada vez más a la vida plena y abundante que deseamos alcanzar.

Si quieres seguir profundizando sobre este tema, puedes acceder a este material en nuestro canal de Spotify y de Youtube:

En este podcast Enric Corbera invita a transformar las dificultades en aprendizajes para nuestra evolución. ¿Reconoces qué desafíos enfrentas en el ámbito laboral?

En este video Enric Corbera propone que cuestionemos nuestras certezas para abrir nuestra mente a una visión más holística, a una conciencia de unidad. ¿Identificas cuándo oscilas entre una mente abundante o de escasez?

Si quieres conocer más acerca del método de la Bioneuroemoción y cómo aplicarlo en tu vida para aumentar tu bienestar emocional, síguenos en nuestras redes sociales: YouTube, Instagram, Facebook, Twitter y Linkedin.

Comparte en los comentarios si te ha resultado interesante este artículo y compártelo a quien creas que le puede resultar útil esta información. ¡Gracias por tu interés!