El rencor: un camino hacia la transformación

¿Cómo reaccionamos cuando sentimos que fuimos tratados de forma injusta? ¿Qué razones inconscientes hacen que mantengamos el rencor en el tiempo?

En este artículo vamos a analizar qué hace que decidamos, ya sea a nivel consciente o inconsciente, sostener este sentimiento. De esta forma podremos identificar qué estamos dispuestos a soltar para poder liberarlo y quedar en paz con nosotros mismos.

¿Qué estrategias podemos emplear para dejar ir el rencor?

Qué es el rencor

El rencor es una reacción poderosa que todos hemos experimentado en algún momento. Surge como una respuesta espontánea a una actitud dirigida a nosotros que consideramos ofensiva.

Albergar este sentimiento tiene el mismo efecto en nuestro cuerpo que el estrés y la ansiedad. Aferrarnos a él  puede ser perjudicial para nuestro bienestar, tanto emocional como físico, y puede llegar a deteriorar enormemente nuestras relaciones.

La verdadera víctima del rencor

El rencor tiene una particularidad y es que siempre perjudica más a quien lo siente que a quien lo recibe. Por eso, el hecho de sostenerlo en el tiempo podría parecer una decisión sin sentido

¿Quién quiere pasarlo mal, quién disfruta sufriendo o guardando un resentimiento que le quema por dentro?

No obstante, cada conducta conlleva algún tipo de beneficio para el que lo realiza. Cada decisión que tomamos, por desagradable que sea, siempre tiene una intención positiva.

«Cuando reconoces y respetas la intención positiva detrás de tus acciones pasadas, te liberas para crear un futuro mejor.»

Jack Canfield

Qué conseguimos guardando rencor

Cuando consideramos que hay alguien a quien culpar evitamos hacernos responsables de nuestra infelicidad, incomodidad o insatisfacción.

Por ejemplo, si aún nos sentimos ofendidos con nuestra expareja porque nos fue infiel hace años, albergamos un rencor que nos mantiene vinculados a ella. Además, al no asumir nuestra parte de responsabilidad en lo sucedido, perdemos la oportunidad de integrar el aprendizaje que nos ofrece esa experiencia y, probablemente, se nos volverá a repetir algo similar, no para sufrirlo, sino para aprender y evolucionar.

Soltar la culpa y el rencor implica hacernos responsables de nuestra vida. Requiere dejar de ver fuera de uno mismo la causa de nuestra desgracia y hacer esto no siempre es sencillo.

Atrapados en el resentimiento: El desafío de dejar ir

Para muchas personas es preferible seguir manteniendo un vínculo desde el resentimiento que dejarlo ir. De este modo pueden seguir sosteniéndolo en vez de aceptar esa pérdida y seguir adelante.

Cuántas parejas conocemos que, aún sin soportarse, no quieren ni pueden estar el uno sin el otro. A veces la dependencia emocional hace que, cuando no sabemos vivir queriéndonos, pasemos la vida odiándonos.

Si nos encontramos arrastrando un rencor que nos pesa, podemos volver a observar lo sucedido con una nueva conciencia, comprendiendo que lo que nos afecta no es lo que ha hecho el otro, sino lo que nosotros interpretamos.Y esto podemos cambiarlo.

Tomar conciencia de que solo nosotros somos responsables del rencor que cargamos nos permite comprendernos en profundidad y transformarnos. De este modo, la carga desaparece. Abandonar el resentimiento puede ayudarnos a vincularnos de otra manera, a construir relaciones sanas con los demás y con nosotros mismos.

«Perdonar no es olvidar, es liberar un prisionero y darse cuenta de que el prisionero eras tú.»

Lewis B. Smedes

Transformar nuestras emociones

Si nos dieran a elegir, todos quisieramos experimentar emociones de bienestar, calma, alegría y felicidad. Sin embargo, muchas veces dejamos que las emociones que experimentamos como negativas se apoderen de nosotros y las justificamos para seguir en una postura que creemos que nos beneficia.

El rencor muchas veces esconde otros sentimientos, como tristeza o dolor, que puede costarnos identificar y expresar. Reconocer estas emociones puede ayudarnos a salir de esta postura y enfrentar lo que nos bloquea o limita.

En tal sentido, el perdón hacia nosotros mismos y hacia los demás implica un renacimiento, una nueva forma de ver la vida.

El rencor como escudo emocional

El rencor también nos puede servir para cubrir sentimientos y emociones más profundas que tal vez sintamos que no estamos preparados para afrontar y expresar.

Esto nos sitúa en una zona de confort en la que nos sentimos seguros frente a la idea de afrontar las emociones que nos muestran la necesidad de hacer cambios más drásticos. La intención positiva del rencor es la de protegernos de algo que consideramos que puede lastimarnos, actuando como una barrera para el cambio.

En otras palabras, usamos el rencor para tener una razón que nos sirva como justificación para exigir que el otro cambie y quedarnos como estamos, sin hacer nada para cambiar las cosas. Aferrarnos a esta postura implica adoptar un rol victimista en el que cedemos nuestro poder a los demás.

“Mejor que perdonar es sanar la imaginaria herida, que el imaginario agravio abrió en el herido ego del aparente yo.”

Aldous Huxley

Cómo andar más liviano por la vida

Una buena pregunta que podemos hacernos es ¿prefiero tener razón o ser feliz?

La sensación de bienestar que experimentamos al dejar ir un enojo es reparadora. Nos hace ver la vida con otros ojos y nos libera de un peso que puede llegar a perjudicarnos física, emocional y mentalmente.

Tomar del rencor el regalo de sus aprendizajes

El rencor actúa como un indicador de algún desorden interno que requiere nuestra atención. Mirarlo desde esta perspectiva nos ayuda a identificar áreas en nuestra vida que necesitan transformación, con lo cual, podemos tomarlo como escalones en nuestro crecimiento personal.

Al enfrentar las raíces del rencor, podemos llegar a las heridas emocionales para sanarlas, cambiar patrones negativos de pensamiento y mejorar nuestra capacidad para establecer límites saludables.

En este proceso de autoexploración y transformación nos abrimos a una mejor comprensión de nosotros mismos y alcanzamos una mayor paz interior. El rencor, visto desde esta óptica, se convierte en una valiosa guía para nuestro desarrollo personal y bienestar emocional.

Si quieres seguir profundizando sobre este tema, puedes acceder a este material en nuestro canal de Spotify y de Youtube.

Enric Corbera nos hace reflexionar en este episodio sobre la importancia de perdonar a otros y a nosotros mismos para liberarnos del rencor y de la culpabilidad.

Enric Corbera nos hace reflexionar en este episodio sobre la importancia de perdonar a otros y a nosotros mismos para liberarnos del rencor y de la culpabilidad.

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